
El pensamiento divergente es una habilidad crucial en la creatividad y la innovación. Se trata de la capacidad de asociar conceptos que, a primera vista, no parecen coincidir. Cuando observamos desde una perspectiva diferente, podemos descubrir fuertes vínculos que nos llevan al nacimiento de nuevas ideas. Estas ideas pueden no ser necesariamente buenas, pero son, sin duda, diferentes y pueden abrir puertas a nuevas posibilidades.
El pensamiento divergente es un proceso que fomenta la curiosidad y la flexibilidad mental, permitiéndonos salir de nuestra zona de confort y pensar más allá de lo convencional.
Esta habilidad mental puede dar lugar a nuevas ideas. No todas serán geniales, pero definitivamente serán diferentes. Y lo diferente es lo que buscamos. Se trata de salir de ese bucle de pensamiento repetitivo y crear algo fresco.
Entonces, ¿cómo podemos activar nuestro cerebro para que funcione en modo divergente? Aquí van preguntas que estiran la mente:
¿Qué pasaría si combinamos dos cosas totalmente no relacionadas? Como, por ejemplo, mantequilla de maní y teléfonos inteligentes.
¿Cómo funcionaría esto si lo invertimos y lo miramos desde otro ángulo?
¿Cuál es el elemento más inútil aquí que podría ser la clave?
Si los extraterrestres aterrizaran y miraran esto, ¿qué pensarían?
¿Qué pasaría si tuviéramos dinero, tiempo y superpoderes ilimitados?
¿Cómo podemos llevar esta idea y llevarla al extremo?
¿Cuál es la conexión más loca que podemos hacer entre estas cosas al azar?
Así que ahí lo tienes. Comienza a activar esas sinapsis, haz esas conexiones locas y empieza a «grabbing the idea». ¡Quién sabe! Tu próximo pensamiento podría ser el que cambie las reglas del juego. ¡Mantén la creatividad viva, sigue pensando fuera de la caja y nunca dejes de explorar!
NOTA PARA INCRÉDULOS
Aquí hay siete inventos o novedades que surgieron del pensamiento divergente, ordenados cronológicamente:
- Método de enseñanza Montessori (1907): Un enfoque educativo que promueve la autonomía y el aprendizaje a través de la exploración y la creatividad.
- Velcro (1941): Un sistema de cierre que utiliza ganchos y bucles, revolucionando la forma de unir materiales.
- Post-it (1968): Nació de un intento fallido de crear un adhesivo fuerte, pero resultó en un pegamento que se podía despegar fácilmente.
- Bioplásticos (1980): Materiales biodegradables que se desarrollaron para reducir el impacto ambiental de los plásticos tradicionales.
- Dispositivos de realidad virtual (1990): Tecnologías que permiten crear entornos inmersivos, revolucionando la forma en que interactuamos con el mundo digital.
- Agricultura vertical (1999): Un sistema que utiliza el espacio vertical para cultivar plantas, optimizando el uso de recursos en áreas urbanas.
- Impresión de órganos en 3D (2000): Un proceso innovador que busca crear tejidos y órganos humanos utilizando impresoras 3D, abriendo nuevas posibilidades en la medicina.
Estas innovaciones demuestran cómo el pensamiento divergente puede llevar a descubrimientos sorprendentes y útiles. ¡Así que sigue explorando y pensando diferente!
Roy J Rizo D’Arthenay
Business Coach
30 años de experiencia sector farmacéutico
Facilitador del Pensamiento Divergente
