Rezar y Votar con Sabiduría

El 28 de julio de 2024, los venezolanos con derecho al voto enfrentaremos una encrucijada histórica. La responsabilidad que pesa sobre nuestros hombros demandará un inmenso coraje: el coraje para impulsar el cambio que anhelamos o la entereza para aceptar con serenidad el camino que la mayoría decida. Ante este desafío crucial, la Plegaria de la Serenidad de Reinhold Niebuhr se erige como un faro de luz y guía espiritual.
Reinhold Niebuhr, reconocido teólogo del siglo XX, legó al mundo esta oración que ha trascendido credos y fronteras. Su mensaje, un llamado a la sabiduría para aceptar lo inevitable, el coraje para cambiar lo que está en nuestras manos y la sabiduría para reconocer la diferencia, resuena con fuerza en el corazón de la Venezuela actual.
El simple acto de votar ya es una muestra de sabiduría cívica, un compromiso con el futuro de nuestra nación. Pero la verdadera sabiduría reside en analizar, discernir y finalmente elegir sensatamente la opción que consideramos más beneficiosa para el país. El voto es un arma poderosa, una herramienta de cambio que debemos ejercer con responsabilidad y lucidez.
En la víspera de esta importante jornada electoral, elevemos una plegaria al cielo, una plegaria impregnada de la esperanza y el anhelo de un futuro mejor. Una plegaria que he llamado:
Sabiduría para el Bravo Pueblo
Señor, Dios, escucha nuestra plegaria en este momento crucial para Venezuela.
Concédenos la serenidad para aceptar las cosas que no podemos cambiar,
Los bríos para afrontar los desafíos que se presenten
y la sabiduría para construir un futuro próspero.
Ilumina nuestras mentes para ver con claridad,
fortalece nuestra voluntad para resistir la tentación del desaliento
y guíanos hacia la decisión que conduzca al bienestar de todos.
Que cada voto depositado el 28 de julio sea un acto de coraje y sabiduría por Venezuela,
un paso hacia la reconciliación y la construcción de una sociedad más justa.
Que nuestra nación renazca de la mano de la sabiduría, el coraje y la esperanza.
Amén.
Que esta oración , inspirada en la plegaria de la serenidad de Reinhold Niebuhr, nos acompañe al ejercer nuestro derecho al voto. Recordemos que el futuro de Venezuela está en nuestras manos. Con fe, esperanza y sabiduría, construyamos juntos el país que soñamos.
Roy J. Rizo D’Arthenay
